Comprar un barco de segunda mano puede ser sin duda una muy buena opción, ya que puede suponer un importante ahorro de dinero. Una embarcación de segunda mano tiene, de partida, un precio mucho más accesible que el de una embarcación nueva. No obstante, conviene tener muy presente el popular dicho de que “lo barato sale caro”…
Para evitar posibles disgustos, conviene ser muy cautos a la hora de elegir, hay que estar muy seguro de lo que compramos, para que el supuesto ahorro no se convierta en una pérdida total de dinero.
En este artículo queremos resumir los puntos más importantes a valorar a la hora de comprar un barco de segunda mano, para evitar cualquier posible disgusto en el futuro…
Si quieres evitar que la compra de un barco de segunda mano se convierta en un dolor de cabeza te recomendamos que tengas en cuenta los consejos de los que hablamos a continuación.
DÓNDE BUSCAR TU BARCO
Sin lugar a dudas, lo primero que debemos considerar es dónde podemos buscar un barco de segunda mano.
En principio podemos considerar las siguientes opciones:
- INTERNET: en la red encontraremos multitud de portales y páginas web que ofrecen una amplia variedad de barcos de ocasión. Además de fotos de los barcos, estas webs suelen disponer de buscadores con los que filtrar la búsqueda, por lo que puedes afinar mucho tus necesidades según criterios como el precio, eslora, camarotes, año de fabricación… y muchas más opciones.
Muchas de estas webs te permiten crear alertas con tus criterios de búsqueda que se ajusten a tu barco deseado, de manera que cuando aparece una opción que se ajusta a tus necesidades, te informarán convenientemente. Esta es sin duda una funcionalidad que conviene utilizar, ya que resulta muy cómodo estar informado y, sobre todo, porque eso puede evitarnos “perder” una oportunidad que nos interesa.
- PUERTOS DEPORTIVOS: Para buscar barcos de segunda mano también puedes visitar los puertos deportivos de la zona, ya que muchos vendedores, no ponen el barco en portales de venta de barcos, sino que simplemente colocan un cartel de «Se vende» directamente en la embarcación (aunque esta opción suele ser más escasa que la anterior y va a menos).
- FERIAS: Si tienes la disponibilidad y te encaja en tiempos, asistir a alguna feria o mercado de ocasión de los que se celebran en diferentes ciudades a lo largo del territorio nacional, es sin duda una magnífica opción puesto que te permite revisar diferentes opciones de compra en un mismo lugar.
A mayores de esto, conviene tener en cuenta la posibilidad de recurrir a la ayuda de un experto independiente. Es muy recomendable y casi imprescindible, pedir asesoramiento de algún experto náutico, como por ejemplo un ingeniero naval o inspector de ITB. Lo ideal que sea él quien realice una inspección exhaustiva del barco y elabore un informe que certifique el estado de la embarcación, con recomendaciones, valoraciones… Esto nos evitará desplazamientos, pérdidas de tiempo y, sobre todo, nos garantizará que la inversión que estamos haciendo es adecuada y no estamos “tirando el dinero”.
CUÁNDO COMPRAR
El primer y más importante consejo que podemos darte en relación a cuándo comprar es: “no tengas prisa en realizar la compra”.
Nunca realices la compra con prisa, y solo hazlo cuando tengas todo totalmente claro, ya que las prisas son malas consejeras cuando se trata de comprar cualquier cosa, y más al hablar de un barco de segunda mano.
Para muchos la mejor temporada del año para la compra de una embarcación es después del verano, en otoño; el motivo es claro: es entonces cuando muchos patrones valoran que el uso que están haciendo de la embarcación no es suficiente o, simplemente no les “compensa”, ya que mantener un barco durante todo el año conlleva tener que pagar el alquiler del puerto también durante el invierno. En consecuencia, muchos deciden ponerla en venta y por tanto es cuando más opciones podemos tener y, ya se sabe: “la ley de la oferta y la demanda”, cuantos más barcos estén disponibles para la venta, más opciones tendremos de conseguir un buen precio.
CARO O BARATO
Caro o barato son siempre términos relativos y, por tanto, es necesario que se tengan en cuenta una serie de consideraciones que nos ayuden a valorar el tema del precio en su totalidad.
- Intenta fijarte un presupuesto. Es muy importante que tengamos claros nuestros límites; es el primer punto que nos ayudará a filtrar la oferta que recibamos.
- Intenta fijarte unas necesidades concretas. Tan importante como el dinero que vas a gastar es tener bien claro cuáles son las necesidades o lo que exigimos a la embarcación. Que sea el barco más caro no tienen por qué ser la mejor opción para ti; piensa el uso que le vas a dar al barco.
- Revisa los gastos posteriores: debes tener en cuenta que poseer una embarcación conlleva unos gastos de mantenimiento, los trámites de traspaso, la certificación, el amarre y la contratación de un seguro de embarcaciones… Conviene que realices un cálculo estimativo de todos estos gastos para que no te cojan de sorpresa y seas plenamente consciente de si puedes o no permitirte poseer un barco (o el barco que en concreto deseas).
COMPROBAR EL ESTADO DEL BARCO
Evidentemente, ninguno queremos sentirnos “estafados”… para evitar que esto suceda en la compra de cualquier producto de segunda mano, resulta imprescindible que realicemos una serie de revisiones antes de hacer la compra en firme.
En este sentido deberemos:
- Examinar el barco tanto a flote como en seco. Es vital examinar tanto la obra muerta como la obra viva de la embarcación, para asegurarnos de que el casco no tiene ósmosis, grietas, golpes, ni ninguna alteración que pueda dar posteriores problemas.
- Pedir una prueba de navegación del barco. La realización de la prueba de mar debe servir para comprobar la estabilidad, evolución, flotabilidad, escoras, gobierno… También fíjate en las vibraciones que se transmiten del barco, su comportamiento durante la aceleración o que el aislamiento del sonido del motor es efectivo y no afecta a la comodidad. A veces, los vendedores profesionales te pedirán una señal para poder poner en marcha el barco en alta mar.
- Recuerda revisar los equipos de seguridad. No es obligatorio que un propietario te proporcione todo el equipo de seguridad, pero el revisarlo te evitará riesgos, comprueba si es necesario adquirir nuevos salvavidas, antorchas o extintores. Si la embarcación ya dispone de ellos, comprueba su estado y si cumplen la normativa vigente.
- Pedir la documentación del casco y del motor, ya que es indispensable en la transferencia de una embarcación de segunda mano. La documentación tiene que ser la original, ya que si no lo es la Administración Marítima puede solicitar la emisión de informes de ingeniería naval para valorar la idoneidad del barco.
Además deberá tener a mano el libro de mantenimiento del motor y los documentos de las últimas revisiones o reparaciones te dará una visión del estado del motor. Recuerda que en su buen funcionamiento influyen aspectos como las correas, los filtros y las baterías.
- Solicitar el certificado de navegabilidad. El Certificado de Navegabilidad acredita que la embarcación cumple todos los requisitos reglamentarios y legales para salir al mar. Este documento está regulado por el Ministerio de Fomento y lo expide siempre la Administración Marítima.
También deberás pedir todo lo relativo a la documentación administrativa del barco, como el Permiso de navegación, Registro marítimo español y Hoja de asiento, así como la Licencia de estación de barco si la tiene.
- Comprobar que el barco no tiene cargas fiscales o embargos. Para esto lo mejor es pedir ayuda a una gestoría náutica, que además te puede facilitar toda la información que necesitas antes de realizar la compra.
Parece una obviedad, pero siempre es importante recordar que toda la documentación solicitada tiene que estar en vigor: no olvides comprobar que es así para no llevarte un disgusto.
