Como bien dice el popular refrán: “mal acaba lo que mal empieza”… esto mismo se podría aplicar al golf: si cometemos errores a la hora de colocarnos a la bola, realizar un buen golpe será algo prácticamente imposible.
Por eso es tan importante que tengas totalmente claros los puntos que garantizan una correcta colocación a la bola.
Nosotros vamos a intentar resumirlos aquí de forma muy sencilla, zona a zona:
- HOMBROS: el derecho debe estar más bajo que el izquierdo.
- MANOS: siempre por encima de la bola.
- CODOS: deben señalar a la cadera. El derecho se situará ligeramente por debajo del izquierdo, lo que sin duda nos ayudará a cuadrar correctamente los hombros.
- BRAZOS: el brazo izquierdo debe permanecer recto y cómodo; el derecho doblado y relajado (por supuesto, al revés en el caso de los jugadores zurdos).
- PIES: los dos pies tienen que mirar hacia fuera para facilitar así el giro completo de la parte superior del cuerpo, sin perder equilibrio.
Te recomendamos que cada vez que te coloques a la bola, compruebes que cada una de estas partes comentadas está correctamente posicionada.
En poco tiempo realizarás esta colocación de manera totalmente natural, sin necesidad de pensar en cómo lo estás haciendo.
