La importancia de los pies en el swing

Entrenamiento

A pesar de que no siempre le damos la importancia que merecen, lo cierto es que los pies son una parte fundamental en el correcto desarrollo del swing. Efectivamente, los pies son el punto de apoyo del cuerpo y como tal resulta fundamental que se muestren firmes y bien colocados si queremos realizar un swing preciso y potente.

La colocación de los pies es uno de los factores más importantes para determinar la eficiencia de un jugador a la hora de imprimir velocidad a la cabeza del palo. A continuación le damos todas las claves.

LA COLOCACIÓN CORRECTA

Lo primero que debe tener claro es que la colocación de los pies debe resultarle cómoda. Los pies han de encontrarse lo suficientemente juntos para poder moverse con comodidad pero también lo suficientemente separados como para que nuestro cuerpo disponga de la estabilidad que necesitamos para realizar correctamente el movimiento del swing.

De forma teórica cuando nos situamos frente a la bola de golf para golpearla, nuestro pie izquierdo debe de situarse con un ángulo de entre 30 y 45 grados con respecto a la posición paralela que forman nuestros pies al adoptar una postura natural. Esto claro está es algo muy personal pues intervienen factores como la condición física, la flexibilidad o la movilidad del jugador.

Para hacernos una idea de la colocación correcta de nuestros pies el talón del pie izquierdo debe ser la referencia. De esta forma, el talón debe encontrarse siempre en la línea recta imaginaria paralela a la que formaría en ese momento nuestro pie derecho. A partir de ahí la experiencia de cada jugador va moldeando la situación de los pies en cada uno de los golpes hacia la colocación que mejor le funcione.

Otro factor importante es la distribución del peso, algo que también es muy personal en función del estilo de swing pero que de manera estándar la teoría dice que debemos distribuir uniformemente el peso entre nuestros pies y por tanto entre ambos lados de nuestro cuerpo. Debemos intentar que ambos pies soporten el mismo peso en el momento previo al swing cuando nos colocamos frente a la bola.

Aquellos jugadores que no consigan suficiente arco de swing con la posición que se presume correcta, tenderán a situar su pie derecho con un pequeño angulo hacia la derecha de la posición correcta.

ALINEACIÓN CORRECTA DE LOS PIES

La alineación correcta de los pies respecto a la dirección objetivo es la premisa básica para poder ejecutar el swing de golf en la dirección correcta, para tener precisión. En otras palabras, prestando atención a la correcta alineación de los pies en el stance de golf conseguiremos mejorar la precisión de nuestros golpes.

La manera más fácil de hacerlo es repasando la rutina pre-golpe. Normalmente, antes de jugar una madera o un hierro solemos ponernos detrás de la bola para decidir la línea de objetivo de nuestro golpe. Acto seguido nos ponemos en el stance y golpeamos la bola.

En este punto está la clave, ya que cuando hemos decidido nuestra línea de objetivo debemos proyectarla hacia abajo y buscar cualquier cosa que se encuentre aproximadamente a un metro por delante de la bola. Una piedra, un tee, el punto medio o el extremo de una chuleta…

Teniendo en cuenta ese punto y situándonos ya en nuestro stance, nos resultará mucho más fácil encontrar la línea que forma ese punto seleccionado con la bola que la línea de objetivo inicial. Por tanto, nos situaremos paralelos a esta línea y terminaremos la rutina pre-golpe que estamos acostumbrados a hacer.

LA IMPORTANCIA DE LOS PIES EN EL SWING

Una vez hemos comenzado el swing, debemos de tratar de evitar cualquier tipo de descompensación en la distribución del peso entre nuestros pies. Un buen movimiento de pies es fundamental para un juego consistente y fuerte, y para ello hay una secuencia que debería seguir. Empiece situando su centro de gravedad directamente sobre las almohadillas que están inmediatamente detrás de los dedos de los pies.

Para lograr el ansiado y necesario equilibrio a lo largo del swing, lo más importante será el mantener la distribución del peso a través del swing. Para ello deberá ser capaz de jugar con el interior de los pies.

En el backswing su peso estará en la parte interior del pie más retrasado: para ello la parte inferior del cuerpo no deberá girar tanto como la superior.

Coja el palo y llévelo hacia atrás, dejando que su peso se mueva ligeramente hacia el interior de su pie derecho y finalmente, hacia el talón.

Conviene mantener el pie izquierdo en el suelo según se aleja el cuerpo de la bola en el backswing, lo que sin duda nos ayudará a maximizar el giro. El mantener el pie izquierdo en el suelo nos permite mejorar la resistencia de la parte inferior del cuerpo, lo que sin duda conlleva la posibilidad de realizar un swing mucho más potente.

Después, en lo más alto del swing, el peso estará completamente en el lado derecho.

Durante el backswing hay jugadores que levantan ligeramente el talón del pie izquierdo. Esto es debido a que quieren realizar un swing con «mayor profundidad» o a que no cuentan con la flexibilidad corporal suficiente para mantener el pie izquierdo completamente sobre el césped durante todo el backswing. Un truco para evitar tener que levantar los talones de los pies del suelo en el backswing es inclinar ligeramente los tobillos.

En el downswing su peso estará en el interior del pie más adelantado.

Cuando empiece el movimiento del downswing, apoye firmemente el talón izquierdo en el suelo para iniciar la rotación de las caderas hacia delante. Ese movimiento le permitirá acelerar el swing y soltar el palo con fuerza a través del impacto.

Por lo tanto en el address (colocación a la bola), procederemos a abrir ligeramente la punta del pie izquierdo, lo que nos permitirá rotar las caderas sin problemas al realizar el swing. Mientras, el pie derecho se mantiene cuadrado con la línea del objetivo para ayudar a limitar el giro de la cadera y mantener la posición de la rodilla en el backswing.

Durante esta fase del swing, el talón del pie trasero no se despega del suelo sino que es solo la parte exterior del pie la que se levanta debido al movimiento de las caderas en dirección al objetivo.

Finish: En esta fase, el talón del pie trasero ya está totalmente levantado por efecto de la rotación de las caderas. Como éstas se encuentran orientadas hacia el objetivo, la única manera de que el pie trasero las acompañe es apoyándose en la punta del mismo.

En definitiva, si su juego de pies es bueno, será capaz de conseguir un finish equilibrado y seguro. Intente poner casi todo el peso de su cuerpo en el pie delantero, utilizando el otro pie únicamente como si fuera un contrapeso.

Etiquetas : Clases de golf, Swing
Publicado en: Golf, Entrenamiento

New Account Register

¿Ya tienes una cuenta?
Log in instead Or Reiniciar contraseña