Golf bajo la lluvia

Consejos

Jugar al golf con lluvia se establecen una serie de nuevos retos que en seco no tenemos, tanto el escenario, las circunstancias, como nuestro equipo se ven significativamente alterados con la lluvia, debido a esto necesitamos ajustar nuestro juego, vestimenta y accesorios a estas nuevas condiciones.

EQUIPO NECESARIO BAJO LA LLUVIA

Es necesario preparar todo el equipo que vamos a necesitar para poder desenvolvernos en condiciones de agua y humedad, para que nuestro juego se vea alterado lo mínimo.

El paraguas de golf es un elemento esencial para jugar al golf con lluvia, pero no un paraguas normal, puede que no sobreviva, lo mejor es llevar un paraguas de golf. Gracias a sus grandes dimensiones, nos cubren a nosotros y a la bolsa. Además, en muchos casos tienen un sistema de dos piezas que permite que el flujo de aire circule, evitando que no salga volando ni se rompa.

Otro elemento necesario para jugar al golf con lluvia es el traje de agua. Existen en el mercado gran variedad de chaquetas, pantalones y sombreros, de diferentes calidades y precios, pero si jugamos en clima húmedo merece la pena invertir en un buen traje de agua de golf, que serán mas cómodos, secos ydurarán mucho mas tiempo. El material ideal para un traje de agua de golf es el Gore-Tex.

Si usamos guantes es recomendable meter un par extra en una bolsa de plástico dentro de la bolsa de golf. Permanecerán secos y tendremos un recambio para cuando los guantes se empapen. Para que conseguir que el guante permanezca más tiempo seco mientras lo utilizamos al jugar al golf con lluvia, la mejor opción es utilizarlo solo y exclusivamente para efectuar el golpe, es decir, quitarlo después de cada tiro.

Para jugar al golf con lluvia es importante llevar varias toallas de golf, debido a la que tenemos fuera, acabara mojada. Además de las toallas para secar el material es necesario llevar una para el secado personal. Un truco muy usado por los jugadores profesionales para mantener más tiempo las toallas secas es colgarlas en las varillas del paraguas, así además de durar secas más tiempo, la tenemos cerca para secarnos la cara, manos y grips.

Tampoco debe faltar cuando jugamos con agua un cubre bolsas de golf de plástico, que no permitirá que el agua entre dentro de la bolsa, deslizándose por las varillas hasta empapar las empuñaduras de nuestros palos de golf esto ayudará a mantener la empuñadura de los palos secos y que no resbalen al golpear la bola. Además el cubre bolsas mantendrá todas nuestras cosas secas dentro de los bolsillos y alargaremos la vida útil de la bolsa de golf.

Ni que decir tiene la importancia de utilizar unos buenos zapatos de golf impermeables. Hay que revfisar las suelas de los zapatos y el estado de los clavos. No salgamos al campo si están desgastados; corremos un serio riesgo de resbalar y además no nos encontraremos nunca seguros para realizar el golpe… Una firme posición de los pies es el principio para jugar bien al golf. Tampoco es mala idea tener un par de calcetines extra, para cambiarlos en el caso de que se nos mojen.

También existen unas barritas que al romperlas producen calor. Guardadas dentro de las manoplas o en los bolsillos permiten mantener las manos calientes. Cuando las manos se enfrían no se puede sentir el palo, y si encima está mojado mucho peor.

CONSEJOS PARA JUGAR CON LLUVIA

La lluvia multiplica por dos las dificultades propias del juego, y es fundamental que cuando éste elemento aparezca sepamos mantener la calma y que procuremos jugar con el máximo temple y cuidado, pensando cada uno de los pasos que vamos a realizar.

Con lluvia la estrategia de juego toma un rol protagónico; así como la capacidad de mentalización por parte del jugador. Paciencia y método son palabras que toman protagonismo los días de lluvia, además tenemos que tener en cuenta varias cosas en el campo:

  • Las calles y los greens están más blandos y receptivos, por lo tanto la bola bota y rueda mucho menos que en condiciones normales, el control es mayor que en condiciones normales ya qu la bola bota y se para, no rueda hasta salirse de la calle o del green como puede pasar en seco. La bola avanza menos, por lo tanto tendremos la sensación de estar jugando un campo más largo de lo habitual. Es importante fijarnos bien, donde van nuestras bolas, ya que puede ser que sea difícil encontrarlas.
  • Con lluvia necesitaremos utilizar un palo más de lo normal debido a la humedad ambiental, el aire está “más pesado” y eso hace que la bola vuele menos, por lo que cogeremos al menos un palo más del que cogeríamos normalmente. Nunca debemos de tratar de golpear más fuerte de lo normal, ya que nos estaríamos saliendo de nuestro ritmo de swing y no dejaríamos fluir nuestro golf. Lo mejor es coger un palo mas y golpear mas suave.
  • No pierdas tu rutina, no debemos dejar que las condiciones climatológicas afecten a la rutina normal. Es complicado lograr adaptar el swing y los golpes para que permanezcan constantes a pesar de las condiciones metereológicas manteniendo nuestro ritmo habitual. Cuando jugamos bajo la lluvia, es muy fácil que nos aceleremos a la hora de golpear la bola. Lo difícil es tomarnos nuestro su tiempo, y mantener la rutina a pesar de las inclemencias meteorológicas, y hacer un buen swing.
  • Si caemos caemos en el bunker, hay que tener en cuenta que la arena estará más compactada de lo normal, por lo que sacar la bola será un poco más difícil que en seco. El palo no cogerá tanta arena y nuestros golpes saldrán generalmente más fuertes de lo normal. Un consejo para tener conciencia del estado real de la arena es una vez dentro del bunker, mover nuestros pies para estar asentados en el stance y de paso tener una lectura de la soltura de la arena.
  • Si el fairway está inundado o escarchado, procuremos simplificar al máximo el swing. En estas condiciones, una amplitud de unos tres cuartos en la subida nos será más que suficiente. Es fundamental que evitemos golpear detrás de la bola: si la cabeza del palo penetra demasiado en el barro, el golpe no será el adecuado y la pelota terminará corta y desviada del objetivo. Lo más importante es que intentemos sacar la pelota limpia, para ello la colocaremos bien hacia fuera del pie izquierdo. Lo más importante es realizar golpes sencillos, no compliquemos más una situación ya de por sí difícil.
  • En el Green la superficie estará más lenta. Calcular la fuerza y la línea será más difícil al estar la superficie húmeda, la bola va ha coger menos las caídas que normalmente por lo que la lectura del green también cambiara sustancialmente. Al estar la superficie húmeda la bola va ha coger menos las pendiente que normalmente por lo que la lectura del green también cambiara.

Por último recordar que jugar al golf con lluvia es una cosa y jugar con rayos en un campo de golf es otra cosa completamente diferente, altamente peligroso y hay que evitarlo siempre. Si se acerca tormenta eléctrica hay que finalizar la partida, ya que el palo de golf es un elemento que atraiga a los rayos. Ante esta situación, mejor no arriesgarse y a refugiarse en un lugar seguro.

Publicado en: Golf, Consejos

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