Roller esquí, esquiar sobre asfalto

Sin lugar a dudas, una de las mejores alternativas para practicar y ponernos perfectamente en forma antes de la llegada de la nieve tiene un nombre: Roller Esquí. Si todavía no conoce esta técnica, preste atención a este artículo. En él le comentamos todo lo que debe saber sobre esta actividad apasionante que estamos seguros le atrapará desde el principio. Porque sea cual sea la modalidad de esquí que usted practique, el Roller esquí es su complemento perfecto…

Historia

A pesar de no ser muy conocido en nuestro país, lo cierto es que el Roller Esquí no es una técnica nueva, al contrario, se trata de una disciplina nacida en los años 80, que se alcanzó su mayor grado de popularidad en los años 90, de la mano de los equipos mediterráneos de esquí de fondo (entre ellos y de forma muy especial, España).
Efectivamente, el Roller nació como un complemento para el entrenamiento de verano de los esquiadores de fondo nórdico, sobre todo en aquellos países en los que la falta de nieve es más acusada.
Y no es de extrañar, la progresión en roller tiene la misma lógica que en esta modalidad de esquí, simulando de una manera casi perfecta el gesto del esquí, lo que hace que el deportista ejerza exactamente los mismos grupos musculares.
A partir de los años 90 esta técnica entra en su auténtico auge, surgiendo los campeonatos provinciales, nacionales, subidas a puertos… Hoy en día dispone de prestigio internacional de tal forma que se han desarrollado diferentes modalidades, competiciones, especialidades…

Técnica

El Roller es utilizado por muchos esquiadores de fondo, que han encontrado en él el complemento perfecto y más completo para su entrenamiento.
Con este deporte conseguiremos reforzar la técnica y sobre todo, trabajar el tren superior (tanto brazos como hombros), tan necesario en la nieve.
El Roller está pensado específicamente para el entrenamiento sobre terreno llano o ascendente. La progresión que se realiza en subida tiene las mismas características que la realizada cuando practicamos esquí, ya sea de fondo o de travesía. Efectivamente, los rollers disponen de un sistema de bloqueo sobre las ruedas traseras con el que se evita el retroceso, funcionando del mismo modo en que lo hacen las pieles de foca o de ceras.
Por lo tanto, la actividad que debe ser realizada simula de manera perfecta el gesto hecho durante la práctica del esquí, trabajando también los mismos músculos que necesitamos para este deporte.
Muchos entienden que para que el Roller Esquí cumpla su misión, debe ser practicado “al límite”, es decir, tratando de dar lo más posible de uno mismo en cada momento, trabajando a la máxima velocidad que nos sea posible todo el tiempo.
Sea como sea, esta técnica nos permitirá mantenernos perfectamente en forma durante cualquier época del año (puesto que, al practicarse sobre asfalto, no necesitaremos de nada especial para salir a entrenar), nos hace disfrutar al tiempo que mejora nuestro estado físico y nuestra técnica; algo que sin duda notaremos cuando por fin podamos regresar a la montaña.

Equipo

Como modalidad heredera del esquí de fondo, comparte con éste muchas características, también en lo que a equipamiento se refiere.
El equipo básico de un “roller-esquiador” está formado por:

• Roller: sin duda el elemento básico del equipo. En estos productos la oferta se ha disparado de manera increíble en los últimos años, apareciendo rollers específicos para cada modalidad practicada, entre ellas:
  • Paso Clásico: el que hacemos al foquear, este tipo de roller retiene las ruedas traseras.
  • Paso Patinador: una nueva técnica, de creciente desarrollo, en ellas el empuje es más dinámico y las ruedas van “locas”. Es el tipo de roller utilizado en las carreras.

  La diferencia más importante entre estos dos tipos se basa en el diámetro de la rueda: 70 x 40 mm para los clásicos y 100 x 20 mm para los patinadores. Además para los clásicos el patín es más largo (700 mm aproximadamente) y más corto para los patinadores (530 mm).

• Zapatillas o botas.
• Fijaciones: ojo, deben ser compatibles con las botas.
• Bastones: deberemos poner especial cuidado en su elección, puesto que no vale cualquiera. Su punta deberá ser de “vidia”.
• Casco.
• Complementos: gafas de sol, guantes, riñoneras… la elección de los complementos dependerá de la época del año en la que nos encontremos. Debemos tener en cuenta que el asfalto es mucho más duro que la nieve y una caída puede tener serias consecuencias: llevar refuerzos en las muñecas, codos y rodillas resulta siempre adecuado como medida de prevención.

Consejos

Recogemos a continuación una serie de consejos que conviene tener en cuenta a la hora de practicar este deporte:

• Cuidado con la velocidad alcanzada, el esquiador siempre debe controlar a la perfección esta velocidad, sabiendo cuáles son sus límites para no perder ese control, lo que podría costarle un serio disgusto no sólo a él, sino también a otras personas.
• Acostúmbrese a revisar correctamente el equipo, para comprobar que todo funciona a la perfección antes de lanzarse a una carrera. Ponga especial atención en las ruedas, tenga en cuenta que ellas deben soportar todo nuestro peso y los diferentes movimientos que queramos realizar.
• Tenga cuidado con las líneas blancas de la carretera, sobre todo si ha llovido pueden resultar realmente resbaladizas.
• Respete al resto de personas y/o vehículos que circulan por la carretera. No hacerlo puede suponer un serio riesgo tanto para nosotros como para los demás.
• Antes de realizar un trayecto, procure conocerlo a la perfección. Resulta conveniente que conozca los posibles problemas que se encontrará: intersecciones, stops, calles sin salida… Tener el recorrido previamente establecido nos servirá no sólo para realizarlo sin problemas sino también para marcarnos un correcto ritmo de entrenamiento.