Biografía
Nacido el 7 de Diciembre de 1972 en Flachau (Salzburgo, Austria), los primeros pasos laborales de Maier le hicieron ganarse la vida como albañil, tarea que combinaba con una incansable ayuda a sus padres en la escuela de esquí de Flachau.
Resulta evidente que su contacto con la nieve llegó desde muy temprano, gracias al oficio de sus padres; pero nadie, excepto él, sabía hasta dónde podía llegar.
Carrera profesional
Amante del ciclismo, la escalada, la natación y el golf, este joven esquiador austríaco protagonizó la más espectacular irrupción en el circuito alpino mundial al ganar en 1998 dos oros olímpicos en Nagano (el gigante y el supergigante), a los que sumaría después la Copa del Mundo. A partir de aquí nadie podría hacerle sombra en el mundo del esquí.
Todo esto después de superar las trabas impuestas por la Federación Austríaca de Esquí, para quienes en 1996 Maier, que contaba por entonces con 23 años, resultaba “demasiado mayor”. Pero él no se iba a dejar derrotar tan fácilmente, debía demostrar al mundo su valía y así lo hizo en la primera oportunidad que se le brindó. En ese año 1996, Alex Reiner, presidente de la federación salzburguesa, le incluyó en la lista de abridores para el Gigante de la Copa del Mundo que se disputaba en enero precisamente en Flachau. Maier dejó a todos con la boca abierta cuando, como abridor, marcó el undécimo y el séptimo tiempo, mejorando el crono del mismísimo Tomba.
Werner Margreiter, principal responsable del equipo masculino austríaco, y Toni Giger, el llamado técnico del milagro, le llevaron a la Copa de Europa, que ganó unos meses después.
Su explosión se produjo en 1998, año en que se ganó los sobrenombres de el extraterrestre, Herman Monster o Herminator, con el que normalmente se le conoce.
En ese año pasó a encabezar el potentísimo equipo austríaco de esquí, puesto del que nadie pudo desbancarle. Maier ha destacado siempre por su afán de superación y su capacidad para asumir riesgos mucho más allá que los demás. Su mentalidad es ganadora y esto le lleva a practicar un esquí agresivo, tan admirado por muchos pero que a punto estuvo de causarle un grave problema en los Juegos de Nagano, al sufrir un espectacular accidente tres acelerar demasiado en el descenso disputado en Hakuba.
En ese momento el esquiador dejó de ser Hermann Maier para convertirse en Herminator, quien superó todas las heridas y traumas y ganó dos merecidas medallas de oro en esos mismos Juegos. “Era algo que soñaba desde hace tiempo”, dijo en aquel entonces Maier. Su hazaña le hizo aparecen en la portada de la prestigiosa publicación Sports Illustrated, donde hacía quince años que no aparecía ningún esquiador alpino.
EL ACCIDENTE
Su carrera parecía meteórica, hasta que un desgraciado 24 de agosto de 2001 sufriera un grave accidente que casi le postra en una silla de ruedas…
Su moto (otra de las grandes pasiones de Maier) chocó contra un coche y por momentos se temió incluso por su vida.
La primera operación tras el accidente duró ocho horas; el único objetivo era salvarle la vida y se consiguió, pero las posteriores complicaciones sufridas en un riñón hicieron que los médicos augurasen lo peor e incluso se llegó a valorar la necesidad de amputar una pierna. Herminator pasó ocho días en un claro peligro de muerte… pero los superó.
Tras esto vendría el calvario de la recuperación, con magulladuras en todo el cuerpo y una pierna (la derecha) con la que pocos contaban. Son tiempos duros en los que las enormes pérdidas de fuerza y peso parecen ser sus menores preocupaciones, Maier sólo piensa en su regreso y afirma “No pude dormir bien durante medio año”. En este tiempo el esquiador admite la gran eficacia de los calmantes pero teme hacerse adicto a ellos y los rechaza; el dolor se hacía por momentos insoportable y no le dejaba descansar.
Comenzaría su recuperación en el Centro de Alto Rendimiento de Obertauern (Salzburgo) y 116 días después del accidente vuelve a calzarse un esquí, para practicar el fondo. En diciembre de 2001 vuelve a practicar su modalidad deportiva, aunque la masa de periodistas que esquía con él y que a punto está de causarle otro accidente, le hace recordar ese día como “uno de los peores” de su vida.
Aunque no pudo alcanzar su primer objetivo, estar presente en los Juegos de Salt Lake City 2002, no se rinde, continúa en un trabajo incansable que le lleva a entrenar con sus compañeros de equipo en el glaciar del Matterhorn en el verano de 2002, donde todo parece ir de maravilla. Pero una nueva lesión mientras entrena el supergigante en Chile le hará frenar en su progresión y, por momentos, se piensa seriamente su retirada del esquí.
Aunque no sucedió así, Maier continuó incansable hasta que el pasado 14 de enero de 2003 retornara a la competición, en el gigante de la Copa del Mundo de Adelboden (Suiza). Trece días después, el salzburgués gana de nuevo en el supergigante de Kitzbuehel.
“Nunca pensé que volvería a ganar tan pronto”, declaró entonces Maier con lágrimas en los ojos.
Desde entonces la leyenda continúa… ya se escucha hablar de “Herminator II”.
Títulos
En su corta trayectoria, Hermann Maier ha participado en un total de 118 carreras y en 66 de ellas ha quedado entre los 3 primeros puestos. Ganó en 41 ocasiones.
A destacar;
- 3 Copas del Mundo (en los años 1998, 2000, 2001)
- – 2 medallas de oro en Nagano 98.
- 4 Supergigantes de la Copa del Mundo (1998, 1999, 2000, 2001)
- 3 x Slaloms gigantes del Mundo (1998, 2000, 2001)
- 2 x Downhill de la Copa del Mundo (2000, 2001)
