La elección del sudadero

Material

Es común, sobre todo en jinetes principiantes, pensar que cualquier mantilla es suficiente para cumplir sus funciones. Sin embargo, esto está muy lejos de la realidad. Elegir un sudadero inadecuado o poco resistente será contraproducente, ya que terminará rompiéndose, especialmente por la zona de la cincha y los bordes. Pero hay males mayores.

Como consecuencia del roce de estas mantas, pueden llegar a producirse heridas en la cruz de nuestro caballo e incluso erupciones causadas por reacciones alérgicas a tejidos poco adecuados. También puede peligrar nuestra integridad física si el sudadero resbala y se desliza, llegando incluso a caer al suelo. Por eso, es fundamental prestar mucha atención a la elección de este elemento y asegurarnos de que se adapta perfectamente a las características de nuestro animal, a la disciplina que practiquemos y a nuestra montura.

Lo primero a tener en cuenta es el material de fabricación. Existen muchísimas opciones, desde los clásicos sudaderos de piel de cordero o fieltro, por lo general más duraderos, hasta modelos más actuales fabricados en tejidos sintéticos.

si queremos priorizar la facilidad de mantenimiento, podemos elegir una mantilla de algodón hipoalergénico. Si preferimos confort, es mejor que apostemos por el algodón natural por la comodidad que aporta. En cambio, si montamos con mucha frecuencia o nuestro caballo suda demasiado, es preferible que escojamos una mantilla con nido de abeja para una mejor ventilación y secado. Mención especial merecen los de borreguillo; si el nuestro es de este material, debemos prestar atención a los nudos que se pueden formar al empaparse, ya que su roce con el caballo puede llegar a resultar muy dañino.

La variedad de materiales es muy amplia: lana, neopreno, gel, espuma… Lo importante es mantenerlo siempre limpio y, a poder ser, utilizar uno distinto para cada caballo.

En cuanto al diseño, las marcas de equitación han ido fabricando en los últimos años sudaderos que conjugan funcionalidad, seguridad y estética. Hoy en día existen multitud de diseños y colores, con la posibilidad incluso de personalizarlos con el nombre de nuestro caballo o con nuestras iniciales. Lo importante es elegir un corte que se adapte bien a la modalidad de equitación que vayamos a practicar. A priori, existen una serie de recomendaciones generales en función de los distintos tipos de monta:

Para cualquier ocasión. Los más versátiles son los de algodón, de forma sencilla o tipo chabraca. Este tejido se adapta a casi cualquier situación, por eso es uno de los más utilizados en la fabricación de sudaderos.

Para excursiones. Aunque, como es lógico, dependerá de la excursión y de sus circunstancias, lo generalmente recomendado para estas escapadas es elegir una mantilla con bolsillos que nos aporte funcionalidad.

Para doma. Como ya hemos dicho, apostar por sudaderos profundos y algo más rectos de lo habitual suele ser la mejor opción para esta modalidad. La idea es que se adapten al faldón largo de la silla de doma.

Para uso exterior. Suelen utilizarse modelos de estilo western o tejidos en algodón.

Por último, hay otro factor incluso más importante que el material o el diseño a la hora de elegir sudadero: la sujeción de éste a la silla de montar. Se trata de un aspecto crucial porque, si la sujeción no es buena, se formarán arrugas, se desplazará constantemente e incluso puede llegar a caerse. En este sentido, tampoco podemos pasar por alto las dimensiones de nuestro caballo. Elegir una talla adecuada es fundamental para asegurar el ajuste del sudadero.

Etiqueta: Sudadero
Publicado en: Hípica, Material

New Account Register

¿Ya tienes una cuenta?
Log in instead Or Reiniciar contraseña