El buceo, como cualquier actividad que el hombre desarrolla en un medio que no es el suyo natural, es arriegado y sobre todo para aquellos que se lanzan a practicarlo sin tener en cuenta sus riesgos.
Hemos desarrollado esta sección para dar a conocer dichos [riesgos], así como las normas de seguridad que todo buceador debe conocer para evitar situaciones de peligro innecesarias; le recomendamos que lo lea con atención.
Antes de la inmersión
- Mantener el equipo con los
cuidados necesarios (revisiones periódicas).
- Conocer los códigos de señales
internacionales.
- Realizar revisiones médicas
periódicas (también al dentista).
- Justo antes de comenzar la
inmersión deberemos comprobar detenidamente el estado de
todo el material.
- Estar en perfecto estado físico.
- Planificar previamente la
inmersión.
- No consumir bebidas alcohólicas.
- No comer copiosamente.
- A poder ser, conviene
contar con una embarcación de apoyo.
Durante el descenso
- Bucear siempre en equipo.
- Iniciar la inmersión
contra corriente, para poder regresar a la embarcación
sin problemas.
- Tratar de equilibrar la
presión timpánica nada más comenzar la inmersión para
evitar el dolor de oídos, si este aparece deberemos
ascender y volver a intentarlo y si aún así se mantiene,
deberemos abandonar la inmersión.
- Conviene llevar siempre un
cuchillo y un tubo respirador.
En la inmersión
- Nunca sobrepasar las
propias posibilidades, ni en profundidad ni en velocidad.
- En caso de pérdida del
compañero, volver a la superficie.
- Si se siente fatigado, no
dude en desprenderse del cinturón de lastre.
- En caso de sentir sofoco,
mantenerse inmóvil durante un rato y después continuar
pausadamente.
- Tratar de mantener siempre
la calma, sin dejarse llevar por el pánico.
- Intentar no llegar a
consumir la reserva de aire.
Al ascender
- No sobrepasar en ningún
caso la velocidad de 18 metros por minuto.
- Respetar las tablas de
descompresión.
Después de la inmersión
- Lavar correctamente todo el
equipo con agua dulce.
- No volar sin que hayan
transcurrido como mínimo doce horas (puede ocasionar un
problema de descompresión).