El submanismo profesional es una actividad que entraña grandes riesgos.
Normalmente, a los peligros propios del buceo deportivo se sumará el hecho de tener que desarrollar un trabajo ya muchas veces ya es de por sí complicado y que complicamos más al tener que llevarlo a cabo en un medio que no le es el propio.
Así, en numerosas ocasiones el buceador profesional pone en peligro su propia vida en el desempeño de su trabajo.
No es por tanto un actividad válida para cualquiera, pero sí es una de las formas de ganarse la vida más espectaculares que pueden existir.
Dedicamos el artículo de este mes a hablar sobre el buceo profesional, dividiéndolo en dos grandes grupos: el Buceo “Oficial” (policías, militares, bomberos…) y el Buceo “Industrial”.
Precaución al leerlo: puede que “te pique el gusanillo…”
BUCEO OFICIAL
Con este nombre reconocemos a todos aquellos profesionales de las fuerzas armadas, fuerzas de seguridad y entidades públicas y privadas que desarrollan una labor encaminada a conseguir unos objetivos de rescate, recuperación de personas, limpieza de fondos peligrosos…
En la mayoría de los casos estos objetivos no son ni sencillos ni placenteros sino más bien todo lo contrario: destrucción, desactivación o recuperación de minas, actuaciones bajo la línea de flotación de un buque para reparar averías, recuperación de víctimas… por tanto no es una labor apta para todas las personas…
Entre los diferentes tipos de buceo oficial distinguiremos los siguientes:
BUCEO MILITAR
Se trata de una actividad que entraña un enorme riesgo, de ahí la necesidad de una preparación especial. En España, el organismo que desarrolla este tipo de buceo es el Centro de Buceo de la Armada (CBA): unidad especializada de las Fuerzas Armadas creada en 1970. En ella se integran:
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- La Escuela de Buceo: sita en Cartagena, imparte los siguientes cursos:
- Buceador Elemental: es el más básico y necesario para realizar cualquier otro curso. Dura dos meses y permite realizar inmersiones de hasta 50 metros con equipos autónomos con la finalidad de reparar daños en buques, localizar artefactos submarinos y bucear en puertos, arsenales o bahías.
- Curso de Aptitud de Buzo: para los cabos primera de la Armada, dura veinte semanas y su finalidad es el adiestramiento en las labores de reparación de buques en puertos y fondeaderos.
- Curso de Especialidad Buzo: destinado a Suboficiales, consta de nueve semanas de instrucción, tras las cuales el buzo estará capacitado para desarrollar labores de defensa de puertos, localización, destrucción y reparación de armamento bajo el agua y rescate de ahogados. Estos suboficiales pueden alcanzar una profundidad de 75 metros con aire y hasta 120 con mezcla de helio-oxígeno.
- Curso de Adaptación a Técnico en Desactivación de Explosivos Submarinos: pueden optar los Oficiales, Suboficiales y Cabos primera que tengan superado este mismo curso en superficie.
- Curso de Buceador de Combate: se trata de la élite del buceo militar, especialistas en reconocimientos de playas, demoliciones submarinas, golpes de mano sobre instalaciones terrestres y ataques a buques.
- Curso de especialidad en Medicina Subacuática: curso de dos años para oficiales del Cuerpo de Sanidad, enfocado al diagnóstico y tratamiento de los accidentes de buceo.
- Unidad de Investigación Subacuática.
- Unidad de Buceadores de Combate.
- Unidad de Desactivación de Explosivos.
- Buque de salvamento A-102 Mar Rojo.
BUCEO POLICIAL
Los buceadores de este tipo de actividad desarrollan diferentes tareas entre las que destaca la investigación subacuática para el esclarecimiento de hechos. El equipo de profesionales que desarrolla este tipo de buceo es el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas del Servicio Marítimo (GEAS). Se trata de una unidad especial de la Guardia Civil, creada en 1981 cuya Jefatura se encuentra en Madrid y cuenta con grupos (GEAS) distribuidos por diferentes ciudades de la geografía española.
Cada grupo está formado por dos equipos comandados por un Suboficial.
A su vez cada equipo cuenta con un Cabo y tres parejas de buceadores lo que permite que sus parejas estén trabajando en el fondo mientras la otra permanezca en la superficie como apoyo.
Todo este equipo se ve complementado con un patrón de embarcación. Esta organización permite realizar los relevos oportunos, entendiendo que el tiempo medio de estancia bajo el agua es de 35 minutos.
Las principales misiones de este grupo son:
- Prestar auxilio a la seguridad de la vida humana en el mar y efectuar salvamentos, rescates y evacuaciones.
- Policía Gubernativa.
- Policía Judicial.
- Policía Fiscal.
- Policía Administrativa.
- Vigilar y socorrer en medios líquidos y no líquidos pero que requieran instrumentos autónomos de respiración.
- Proteger y vigilar las zonas fluviales o marítimas donde se realicen competiciones náuticas o subacuáticas.
- Recuperar cadáveres, vehículos y otros objetos sumergidos de interés judicial o policial.
- Reconocer fondos, cascos de embarcaciones, obras u objetos sumergidos, con fines de seguridad, protección antiterrorista o vigilancia fiscal.
- Combatir y practicar demoliciones subacuáticas en determinadas circunstancias.
Para acceder a esta especialidad es necesario realizar el Curso de Buceador Elemental del Centro de Buceo de la Armada (en Cartagena).
BUCEO DE RESCATE
La actividad que desarrollan estos buceadores conlleva una importantísima carga emocional, ya que en raras ocasiones se consigue rescatar con vida a un buceador que no ha aparecido con vida desde el momento de aviso hasta la llegada de estos buceadores de rescate.
Los diferentes organismos que cuentan con grupos que desempeñan este tipo de actividad son:
- Cruz Roja:entidad privada que desarrolla el buceo de rescate a través de sus voluntarios de “Cruz roja del Mar”.
- Bomberos:entidades autonómicas en las que existen grupos especializados para el rescate o salvamento de personas debajo del mar.
- Guardia Civil:por medio de los GEAS (Grupo Especializado de Actividades Subacuáticas).
BUCEO INDUSTRIAL
Cuando hablamos de buceadores industriales nos referimos a de personas que realizan una actividad profesional debajo del agua, haciendo posible fines tan importantes como la producción de combustibles, la construcción de puertos, la seguridad de los buques, el mantenimiento de nuestro ecosistema…
Sin duda se trata de profesionales perfectamente entrenados, que muchas veces se juegan la vida en su trabajo, donde un mal movimiento o un simple descuido les puede costar accidentes de serias consecuencias, o incluso la propia vida.
Entre las diferentes actividades que se pueden desarrollar de forma profesional, diferenciamos las siguientes clases:
- Corte y soldadura.
- Instalaciones y sistemas.
- Reflotamiento y salvamento.
- Explosivos.
- Reparación a flote.
- Obras hidráulicas.
