PÉRDIDA DE LA BOTELLA

Aunque parece mentira, sucede en más de una ocasión: nos encontramos buceando tranquilamente cuando de repente notamos que la botella se suelta, sin duda habremos dejado la cincha del chaleco floja.

En esos casos necesitaremos con urgencia la ayuda de un compañero.

Nosotros nos colocamos en el fondo o en una pared, lo que encontremos más rápidamente y, agarrados o arrodillados, esperamos pacientemente la ayuda del compañero.

Para evitar este tipo de percances, debemos asegurarnos siempre de cerrar bien la hebilla de la cincha del chaleco y de dejar el extremo de la misma sujeto, para evitar los más que posibles enganches.

Un buen consejo es que antes de colocarse el equipo, lo coja por la espaldera y lo levante, moviéndolo ligeramente para comprobar que efectivamente la cincha del chaleco está ajustada correctamente. También es bueno pasar por agua la cincha puesto que algunas dan de sí al mojarse (siempre conviene estar prevenidos contra esto).