Sin duda en el surfcasting la elección correcta del material es crucial, muchas veces alcanzar la distancia adecuada a la que están comiendo los peces es el factor clave para hacer que nuestra jornada sea un éxito.
Uno de los elementos fundamentales que debemos elegir cuidadosamente es el carrete para pescar a surfcasting, para ello debemos de fijarnos en criterios como la capacidad de lance o la recuperación entre otros. A continuación trataremos todas las claves que debemos tener en cuenta para acertar en nuestra elección.
MATERIALES DE FABRICACIÓN
Empezaremos fijándonos en los materiales de fabricación del carrete, existen diversas opciones como el magnesio, el aluminio, el grafito etc, en principio vamos a descartar los modelos de plástico. En este sentido buscamos modelos fiables y duraderos por encima de modelos más ligeros ya que este aspecto no es tan crítico en la modalidad que nos ocupa.
Los carretes de aleación de magnesio, normalmente presentes en modelos de alta gama, ofrecen unas excelentes cualidades como una gran resistencia y ligereza si bien el precio es más elevado que en modelos de aluminio y grafito.
Los modelos con cuerpo de aluminio son muy resistentes al óxido y a la salitre siendo también bastante ligeros por lo que son la opción más habitual en los carretes de surfcasting de gama media- alta.
Por último tenemos la opción de los modelos de grafito, un material muy ligero pero frágil frente a golpes fuertes. También es un material que soporta muy bien la corrosión. Suelen ser modelos con una gran relación calidad precio.
LAS BOBINAS
Si hay un elemento que distingue claramente los carretes de surfcasting del resto éste suelen ser las bobinas, que suelen ser de perfil más ancho que el resto. Se trata de un elemento esencial responsable de un correcto bobinado del hilo para ganar unos metros extra en el lance. Nuestra bobina debería de tener una capacidad aproximada de unos 250 metros.
Pueden ser de aluminio, grafito o teflón y lo ideal es que pesen lo menos posible. Debemos fijarnos sobre todo en la capacidad de hilo que aceptan y en que el bobinado sea correcto.
Lo ideal son bobinas de perfil ancho, preferentemente con labio de titanio que mejora muchísimo la salida del hilo así como minimiza el efecto memoria del mismo.
Es muy interesante antes de elegir un modelo consultar la disponibilidad de bobinas de recambio y bobinas de teflón pues al pescar con hilos finos es fácil romper la linea y son necesarias bobinas adicionales de rápida sustitución.
Un pescador de Surfcasting necesita varias bobinas en su caja de pesca, las cuales las tendrá cargadas con nylon de distintos diámetros para acoplarlas rápidamente a su carrete de pesca y así adecuarse a las condiciones del mar.
VELOCIDAD DE RECUPERACIÓN
El ratio de recogida: Salvo que vayamos a competir este factor es menos relevante. Lo más común en carretes de Surfcasting es que ronde sobre los 3,5:1 y los 4,8:1 y significa que por ejemplo un Ratio 4,5:1 en este caso significa que el pick-up da 4,5 vueltas alrededor de la bobina por cada vuelta de manivela, l. Lo normal es que busquemos un modelo que recoja entre 90 cm y un metro por vuelta de manivela.
RODAMIENTOS
Son los responsables de que el carrete vaya suave y fino y si estos son de buena calidad durante mucho tiempo. En este aspecto es más importante la calidad que la cantidad. Es habitual dejarse llevar por el número de rodamientos, que sin duda es importante, pero es más importante que éstos sean de buena calidad, en acero inoxidable, sellados, blindados etc.
PICK UP, GUÍA HILOS Y MANIVELA
Buscaremos pick ups (el aro metálico que bloquea el carrete para recoger la línea) y guíahilos reforzados, resistentes y que no se oxiden. Es importante que no se cierren solos nunca pues podemos romper la línea si esto sucede en acción de lance.
El guía hilos debe contar con un buen rodamiento para que no ejerza presión sobre el hilo. En este sentido un buen mantenimiento del guía hilos es esencial.
La manivela debe tener un buen rodamiento para que gire sin ningún tipo de problema. Este es el que ejerce la fuerza al girar y, si es de mala calidad, puede darle demasiado calor al sedal, haciendo que finalmente se parta.
Las manivelas pueden estar reforzadas con algún material que haga que su agarre sea más agradable al tacto y cómodo para el pescador.
El FRENO
Por último vamos a fijarnos en el freno, El freno es el elemento que más se castiga en esta modalidad de pesca debido a que se está utilizando continuamente.
Lo ideal es un freno micrométrico de preciso ajuste ya que lo vamos a estar apretando y aflojando continuamente, por eso un buen freno debe ser rápido y preciso, lo ideal seria que con una o dos vueltas la bobina pasara de estar libre a bloqueada, si ves que apretando a tope el freno la bobina no se bloquea del todo o si tienes que darle muchas vueltas al tapón de freno, es indicativo de que no viene provisto de un buen freno. A veces con solo sustituir las juntas por unas de mayor calidad como el carbono, es suficiente para mejorar sustancialmente el freno.
LÍNEAS Y MONTAJES
Las líneas de pesca serán de diámetro muy fino, se suelen cambiar en cada temporada por el deterioro que soportan debido a la erosión del sol, viento, salitre…. es por ello que se debe de tener un buen mantenimiento para que su duración sea máxima. Para la conservación de las líneas de pesca será recomendable su aclarado con agua dulce después de cada jornada de pesca, y se le puede echar un aerosol o protector para proteger la línea.
Los diámetros más usados serán entre el 0,16 mm y 0,18 mm ya que nos ayudarán a alcanzar grandes distancias con nuestros cebos. Para la unión de nuestra línea de pesca con el puente o cola de rata usaremos nudos de barril en el extremo más fino, de igual diámetro o lo más próximo a la línea de nuestro carrete, es aconsejable que en el extremo más grueso llegue al menos 0,50 milímetros, para que soporte la tensión que se genera en el lance sin romperse, y tenga una longitud total de 3 a 15 metros, estos puentes se caracterizan por su forma cónica, que facilita su salida del carrete.
MANTENIMIENTO REGULAR
Resumimos a continuación una serie de consejos de mantenimiento diario útiles que le ayudarán a mantener su carrete como el primer día por mucho más tiempo.
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Si el carrete le cae al agua, séquelo bien antes de guardarlo. Guardar un carrete húmedo es casi como tirarlo a la basura. Esto es mucho más preocupante en el caso de que el carrete se hubiera caído en agua salada (la cual es, sin duda, mucho más corrosiva).
Por lo tanto, comprobaremos siempre que el carrete está seco y lo haremos sobre todo si lo vamos a guardar durante un largo periodo.
Para secarlo, conviene dejarlo al aire libre, sin la acción directa del sol ni de cualquier otra fuente de calor directa.
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En caso de que el carrete disponga de algún tipo de mecanismo para ajustar la presión del freno, se guardará siempre ajustado a la mínima presión, para que no se mantenga forzado durante largo tiempo.
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Debemos intentar no desarmar el carrete de forma seguida, puesto que corremos el serio riesgo de que desgastar la cabeza de los tornillos, en cuyo caso el carrete no se montará bien y quedará inservible. Por supuesto, utilizaremos siempre la herramienta correcta.