Actualmente, el el campo de los señuelos artificiales tenemos a nuestra disposición una amplia oferta de señuelos que cada año las marcas se esfuerzan en mejorar y presentarnos innovaciones que prometen darnos grandes capturas, sin embargo los señuelos más tradicionales siguen siendo tremendamente efectivos.
Lo cierto es que las cucharillas, ondulantes o giratorias, parecen haber quedado abandonadas en las cajas de señuelos de la mayoría de pescadores y esto es un gran error pues es un señuelo muy efectivo y que nos permite pescar en condiciones donde otros señuelos fallan.
Si echamos un ojo a este tipo de artificial nos encontraremos multitud de diferentes modelos de cucharillas: distintos colores, distintas formas, con elementos extras (plumas, cabezas…), con dibujos… las opciones son muchas y llegar a determinar de manera concreta cuál es la más adecuada en cada caso resulta realmente complicado, por no decir imposible.
A continuación repasamos algunos consejos para sacarles el máximo partido y mejorar nuestros resultados de pesca.
LAS CUCHARILLAS ONDULANTES
Por su gran facilidad de uso, su polivalencia y su enorme efectividad, las cucharillas ondulantes son, sin lugar a dudas, una magnífica opción para pescar tanto en el mar como en aguas continentales. Además tienen otras ventajas como son su precio (mucho menor que otros señuelos más sofisticados) y su durabilidad ya que con sencillo mantenimiento tenemos artificial para muchas jornadas de pesca.
El diseño de la cuchara ondulante no es para nada complejo. Una hoja que debidamente contorneada realiza un movimiento muy sugerente que despierta el instinto de ataque de los depredadores más valiosos, desde lubinas a los grandes lucios.
En un principio, la acción de pesca de esta cucharilla se basaba en la natación con giro sobre sí misma, lo que sin duda atrae a peces de todo tipo. En nuestros días, este tipo de movimiento ha evolucionado y, además de girar, las cucharillas son capaces de realizar marcados quiebros que simulan de manera perfecta el movimiento que realizaría un pez herido.
GRAN POLIVALENCIA
La principal ventaja que encontramos en este tipo de señuelos ondulantes es que los podemos utilizar en todo tipo de escenarios, desde situaciones de mar fuerte con corrientes a embalses de aguas profundas y tranquilas. Esta es una de las principales ventajas de la cuchara ondulante, la polivalencia.
Para conseguir resultados con el uso de las cucharillas, uno de los puntos más importantes es que sepamos seleccionar los modelos en concreto a utilizar para cada caso. Evidentemente el tipo de escenario en el que vamos a pescar determinará en gran medida la elección del modelo de cucharilla adecuado, de esta forma por ejemplo, en mar, debemos ir a modelos más pesados, especialmente si nos enfrentamos a fuertes corrientes en las que tenemos que controlar el movimiento correcto del cebo con una recuperación lenta.
LA ELECCIÓN DE LA CUCHARILLA
Los elementos más importantes que deben ser tenidos en cuenta a la hora de seleccionar nuestras cucharillas ondulantes para pescar son:
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La forma de la cucharilla: el objetivo de este señuelo es el ser capaz de simular correctamente un pez herido, para ello se ha ido pasando de formas ovaladas a otras más bien ahusadas, que sin duda nos ayudan a mejorar notablemente nuestros lances.
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El peso: en nuestros días se ha dotado a las cucharillas de un cierto peso para que puedan ser lanzadas a largas distancias, aunque aparezca el siempre indesado viento. Cabe mencionar que algunos modelos de cucharillas concentran la mayor parte de su peso en el extremo, lo que nos permitirá realizar lances realmente espectaculares y de una complejidad técnica que dependerá de la capacidad del propio pescador.
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El color: La elección de los colores es también importante. Las platas son muy versátiles de gran utilidad para el mar y zonas profundas. Más oscuras como cobre u oro, son mejores para entornos muy claros, días tranquilos y profundidades medias. Incluso en aguas muy claras podemos optar por modelos de colores oscuros, incluso negras.
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La velocidad de recuperación: aunque a nivel general estamos hablando de cucharillas bastante rápidas, lo cierto es que cada modelo en particular tiene su propia velocidad de recuperación que puede influir de manera directa sobre la acción de pesca que realicen. Ni que decir tiene que la velocidad de la cucharilla incidirá directamente sobre el tipo de material que utilicemos para la pesca, así el uso de cucharillas muy rápidas exigirá, como es normal, que dispongamos de un carrete de alta recuperación.
ACCIÓN DE PESCA
Dicho todo esto, deberemos hablar sobre la acción de pesca que debe desarrollarse con las cucharillas ondulantes. Lo primero que hay que señalar es que se trata de una pesca de escasa complejidad técnica: es la propia cucharilla la que realiza todo el “trabajo” ya que se “contonea” a la perfección sin necesidad de ayuda por parte del pescador. En principio es muy sencillo, incluso más que con la cucharilla giratoria, podemos limitarnos a hacer recogidas lentas, ya que muchas ves la picada la encontraremos con tan sólo la caída de la ondulante o los primeros movimientos.
Mención especial merece el tema de la recuperación, de la cual dependerá en gran medida que consigamos o no unos buenos resultados.
El fondo, la existencia de obstáculos o la inactividad de nuestros depredadores nos llevaran a que hagamos una gestión activa de la cuchara ondulante, con paradas para que vuelva a descender (uno de los movimientos que más capturas se consigue), o acelerones para superar obstáculos que luego vuelvan a una caída si queremos probar en la zona posterior y así varias veces. Con ello, presentaremos continuamente ese movimiento atrayente de un pez pasto que lleve al ataque de nuestra presa.
Hay que tener en cuenta que:
– Si utilizamos cucharillas que no realicen quiebros (de las que giran sobre sí mismas), convendrá que intentemos realizar una recuperación irregular, con tirones.
– Si pescamos con cucharillas de elevado peso, lo más habitual es que el pez entre justo en el momento de la caída del señuelo, por lo que no deberemos asombrarnos si a la primera vuelta de la manivela de nuestro carrete ya tenemos el pez clavado en el señuelo.
– En cuanto a la cuestión de cuándo iniciar la recuperación, conviene saber que:
– Cuando los peces se encuentren en la superficie, resultará conveniente que comencemos la recuperación en cuanto el señuelo toca el agua.
– Si los peces están a mayor profundidad, es conveniente esperar a que la cucharilla se hunda.
Cuando sea así el pescador deberá permanecer constantemente pendiente de la línea, ya que es hasta cierto punto habitual que la picada se produzca en la caída y la reacción deberá ser inmediata.
