A pesar de lo alarmantes que en un principio pueden parecer las grandes brechas que en ocasiones aparecen en los barcos de fibra de vidrio, prácticamente cualquier aficionado podrá ponerle solución, siempre y cuando lleguemos a tiempo y no se hayan producido daños estructurales en el laminado.
ANTES DE COMENZAR A REPARAR
Lo primero que debemos hacer es tratar de averiguar cómo se ha producido el daño, ya que eso nos ayudará a determinar si nosotros mismos seremos capaces de ponerle solución o no:
- En caso de que se haya producido mientras estábamos atracados y si la hendidura es de larga longitud, podemos afirmar casi con total seguridad, que el daño habrá sido producido por otra embarcación que debía encontrarse fuera de control. Si es así, también descubriremos diferentes arañazos cerca de la brecha. En estas ocasiones es conveniente revisar la jarcia y las crucetas. Si nadie aparece como culpable, la altura de la señal en la parte alta del costado de nuestra embarcación nos servirá para determinar el tamaño del barco que chocó contra nosotros.
- Si descubrimos un golpe pequeño y profundo, lo más seguro es que haya sido producido por una pequeña embarcación a remos (chinchorro). A pesar de ser de poco tamaño, suelen ser brechas profundas, por lo que siempre es recomendable actuar con rapidez y ponerse en manos de un profesional. Un consejo importante: en caso de que dudes sobre la importancia de la reparación, consulta con un profesional. Ten en cuenta que cualquier arreglo que realices puede rebajar el precio de tu embarcación si en un futuro deseas ponerla a la venta.
PASOS A REALIZAR
1.- Rebajar los cantos y redondear los extremos de la hendidura, para evitar que quede una cola estrecha.
2.- Lijar hendidura y zonas contiguas. Limpiar con un trapo empapado de aguarrás, eliminando cualquier huella de dedos que pueda existir.
3.- En caso de que estemos ante una hendidura profunda, la rellenaremos con masilla de resina, dejando el espacio necesario para la colocación del gel-coat.
4.- Pegaremos tiras de cinta adhesiva paralelas a la hendidura, desde más atrás y superando sus extremos. Su grosor deberá ser similar al de la capa de gel-coat que vayamos a colocar.
5.- Colocar el gel-coat catalizado con una espátula, extendiéndolo con el fin de nivelar la superficie con la cinta enmascaradora y dejando un pequeño montón en uno de los extremos de la hendidura.
6.- Colocar una pequeña lámina de plástico, pegando un extremo en el punto de trabajo más allá de donde hemos dejado el gel-coat más grueso.
7.- Pasar una rasqueta plana por la parte superior del plástico, aplanándolo y apretándolo para quitar el aire que haya podido quedar dentro. Trataremos de hacerlo en un solo movimiento y entendiendo el montoncito antes dejado, a lo largo de la hendidura. Repetiremos el movimiento con la rasqueta hasta asegurarnos de que no queda aire.
8.- Mantener tensa la lámina de plástico, pegando el extremo libre y los bordes.
9.- Una vez que está seco, lijaremos fuertemente la zona, que sobresaldrá según el grosor de la cinta adhesiva.
10.- Lavamos bien la zona y la pulimos con una lijadora eléctrica con caperuza de lana, asegurándonos de no sobrepasar las 2.500 revoluciones por minuto, lo cual podría causar daños por el calor generado.
11.- Dar cera y sacar brillo.
