Al igual que somos precavidos cuando nos toca conducir con lluvia, o que realizamos un mantenimiento de nuestros neumáticos de forma periódica y estamos atentos a los requerimientos del coche; si vamos a conducir con nieve deberemos dar prioridad a los neumáticos que son fabricados expresamente para la nieve, para garantizar una conducción segura. Es un grave error, pero muy común, utilizar los neumáticos que nos han funcionado durante todo el verano cuando hacemos alguna escapada a la nieve.
Hemos querido dedicar el boletín de este mes a los neumáticos, saber cuáles elegir en cada momento es fundamental para garantizar nuestra seguridad y la de todos los que viajan con nosotros.
¿POR QUÉ UN NEUMÁTICO PARA LA NIEVE?
La mayoría de los neumáticos que encontramos en el mercado no son válidos para utilizar en superficies que alcancen temperaturas inferiores a siete grados, ya que en estas condiciones pierden adherencia, lo que supondrá un aumento en el deslizamiento del coche que, en caso de producirse a cierta velocidad, podrá tener como consecuencia un accidente de mayores o menores consecuencias.
Los neumáticos específicos para conducir con nieve están fabricados con un sistema que evita el endurecimiento de la suela al estar en contacto con temperaturas menores a siete grados. Esto lo consigue gracias al uso del sílice, un material que fomenta la adherencia a la carretera, incluso a bajas temperaturas. Además estos neumáticos cuentan con más láminas utilizadas para adaptarse a condiciones de clima difíciles o adversas.
Otro aspecto determinante en los neumáticos para la nieve, es el dibujo o relieve que presentan. Este relieve tiene como finalidad evacuar el agua o la nieve de manera eficiente.
Resulta evidente, por tanto, que lo más recomendable es disponer de unos neumáticos para el verano y otros para el invierno, y cambiar los neumáticos siempre que vayamos a realizar algún viaje en el que esperemos encontrar nieve.
EL FRENADO
Un aspecto fundamental de los neumáticos para la nieve es su capacidad de adherencia durante el frenado, algo que sin duda aumenta notablemente la seguridad cuando estamos en la carretera.
Resulta fundamental que seamos capaces de determinar la distancia de frenado que vamos a necesitar. Esto lo entendemos mejor con el siguiente ejemplo: imaginemos que estamos en una calzada que presenta nieve a 7 grados y tu velocidad es de 50 km por hora, tenemos como resultado una frenada de 32 metros de distancia en total. Si tomamos el mismo ejemplo con neumáticos que no son especiales para nieve, tendremos una distancia de frenado de 63 metros. Es evidente que la diferencia entre los dos neumáticos es bastante alta y puede suponer el tener o no tener un accidente.
Otro factor determinante en el frenado son las curvas, algo bastante común en todas las carreteras cercanas a las estaciones de esquí. En este tipo de carreteras disponer de una distancia de frenado en conjunto con un buen agarre es elemental para nuestra seguridad. Con este tipo de neumático evitaremos que el coche se deslice en una curva y mantenga de forma constante el control sobre la vía.
CONSEJOS PARA COMPRAR TUS NEUMÁTICOS DE NIEVE
Los neumáticos anchos son ideales para la primavera, el verano y el otoño. Pero además de esos neumáticos anchos, convendrá que dispongamos de unos neumáticos para la nieve si tenemos en mente viajar a la montaña y disfrutar de unas vacaciones de esquí.
A la hora de elegir de forma correcta tus neumáticos para la nieve, te recomendamos que tengas en cuenta los siguientes consejos:
1. Medidas de los neumáticos: antes de comprar los neumáticos, deberás confirmar qué modelo le conviene más a tu coche. Comúnmente suelen recomendar ciertas marcas populares, pero lo importante es identificar que las medidas del neumático sean compatibles con el coche.
2. Atención con las ofertas: comúnmente la rotación de los neumáticos de invierno o para la nieve suele ser muy baja, por lo tanto, para contrarrestar este hecho los comercios suelen anunciar ofertas espectaculares a precios de sueño. Para no caer en una trampa, lo primero que debemos hacer es cerciorarnos de la fecha de fabricación de los neumáticos. Detallar que no estén envejecidos, ya que de ser así habrán perdido una de sus ventajas principales: la flexibilidad en bajas temperaturas. Si el neumático tiene más de cuatro años, no se recomienda comprarlos, no podrás disfrutar de sus bondades y no te dará la seguridad que necesitas en carreteras con nieve.
3. Las marcas: actualmente existe gran variedad de marcas en el mercado, así como también gran diversidad de precios. Un error común es optar por neumáticos de invierno muy económicos de marca desconocida. A veces lo barato sale caro, aunque con eso no queremos decir que debas comprar los neumáticos más caros que encuentres… Lo recomendable es identificar una marca conocida con un precio intermedio o razonable.
4. Relieve del neumático: especialmente en la banda de rodadura ubicada en el lateral del neumático, en algunas ocasiones ciertas marcas no disponen de este relieve, que en gran medida es el responsable del buen agarre en la carretera.
LAS CADENAS
Independientemente de que lleves neumáticos de invierno y de que éstos sean totalmente nuevos y perfectos para tu coche, se deben llevar siempre las cadenas para la nieve. Esto se debe a que las cadenas son una herramienta fundamental para situaciones excepcionales, ya que el clima es cierto que se puede predecir, pero también es cierto que puede cambiar drásticamente de un momento a otro. Las cadenas te serán de gran utilidad frente a una gran nevada, en regiones montañosas o al circular en una pendiente pronunciada.
La función principal de las cadenas de nieve es mantener el agarre del coche mientras circula por la carretera, de esta forma podrás controlar de mejor manera las maniobras que realices. En algunos lugares incluso, es obligatorio el uso de las cadenas para poder circular, así que no te pesará llevarlas siempre en el coche.
CONCLUSIONES…
Los neumáticos para la nieve son un producto fabricado especialmente para preservar tu seguridad mientras circulas en carreteras con nieve. A pesar de lo que muchos puedan pensar, estos neumáticos presentan cualidades y virtudes que forman una diferencia bastante alta con respecto a los neumáticos normales o de verano.
En general, es una inversión necesaria para poder disfrutar de viajar a nuevos sitios donde predomine la nieve.
Existen algunas marcas que ofrecen neumáticos óptimos tanto para nieve como para carreteras secas, siendo el caso de CrossClimate de Michelin o 4Seasons de Goodyear, donde destacan por su diseño y tipo de goma polivalente.
