Equipo para pesca submarina

Material

Traje isotérmico

Su función principal es la de mantener la temperatura del cuerpo del buceador, limitando al máximo la pérdida de calor que se produce al introducirlo en un medio mucho más frío como es el agua de mar; en relación con eso debemos tener en cuenta que el enfriamiento del cuerpo puede conllevar escalofríos, apneas más cortas, menor rendimiento… Además y como función de segundo nivel, el traje isotérmico puede librarnos de posibles rozaduras o picaduras de diversos animales.

Tres son las cualidades principales que deberá tener el traje isotérmico: debe ser flexible (con el fin de facilitar la respiración), estanco y resistente.

Estos requisitos han llevado a los fabricantes a la necesidad de desarrollar trajes de neopreno expandido, que suelen ir cubiertos de nailon o lycra. Actualmente podemos decir que existen dos tipos de trajes que suelen utilizarse en el mundo de la pesca:

  • Trajes de neopreno liso por fuera y microporosos (neopreno puro) por dentro. Son trajes lisos que suelen ser utilizados fundamentalmente por aquellos que no tienen por costumbre meterse en rocas, ya que son trajes más delicados y rompen con mayor facilidad. No suelen utilizarse mucho en España.
  • Trajes forrados de licra: los “especiales pesca”; se trata de la versión moderna del traje tradicional. Son mucho más resistentes por fuera que los anteriores pero bastante elásticos (permiten doblar con facilidad). Aúnan por tanto dos cualidades fundamentales; comodidad de movimientos y robustez. Estos trajes se pegan al cuerpo, por lo que conviene colocarlos rociando previamente el traje por dentro con agua jabonosa.

A la hora de seleccionar el traje definitivo debemos tener en cuenta que se comercializan en diferentes grosores, que van desde los 2 a los 8 milímetros. A pesar de que esa es la gama que existe en el mercado, en nuestro país es raro encontrar a alguien que se decante por los extremos; 2 milímetros supone muy poca cobertura y por tanto puede ser muy frío (se usa en aguas cálidas de zonas como el Caribe); mientras 8 milímetros es un grosor demasiado elevado lo que conlleva una flotabilidad mayor y por tanto más incomodidad. En España lo más habitual son las chaquetas de 7 y los pantalones de 5, si bien siempre depende de la zona en la que nos encontremos y de la temperatura del agua, hecho éste que ha llevado a muchos pescadores a disponer de dos trajes, uno para el verano y otro para el invierno.

Guantes y escarpines

Siempre es aconsejable llevar guantes, ya que protegerán nuestras manos de las agresiones propias del medio y del material. El tipo de guante a elegir dependerá de la temperatura del agua, aconsejándose los 3 mm para el invierno y unos simples guantes de goma para el verano.

Los escarpines por su parte son elementos indispensables ya que deben llevarse siempre junto a las aletas. El pescador tiene a su disposición dos tipos de escarpines: con suela de neopreno o con suela recauchutada, éstos últimos son los más adecuados si se tiene pensado caminar por las rocas.

Lastre

El cinturón de lastre nos va a servir para compensar la gran flotabilidad del traje isotérmico, pero su función NO es la de ayudarnos a bajar más.

El cinturón suele ser elástico y dispone de una hebilla de zafado rápido, de fácil y rápida abertura para poder liberarnos de él de un sólo gesto en caso de ser necesario. Si llegase ese momento no debemos dudar ni un instante en desprendernos de él aunque lo perdamos.

Al colocarnos el cinturón deberemos tener especial cuidado en que no nos incomode la ventilación. En caso de dolores lumbares, existen unos arneses de espalda (Baudrier), son igualmente útiles y en ellos deberemos vigilar del mismo modo que nos podamos desprender de él con facilidad.

Para lastrarnos podemos utilizar además plomos en los tobillos, se trata de plomos de 300 a 500 gramos que van sujetos por una tira y que deben ser introducidos bajo el traje.

Para comprobar que estamos correctamente lastrados, antes de sumergirnos intentaremos flotar sobre la superficie y no deberemos notar ninguna tendencia a hundirnos.

Máscara

La máscara cumple dos funciones principales: preservar la correcta visión bajo el agua y compensar la presión en los oídos.

Las características que debe tener una buena máscara para la práctica de pesca submarina son las siguientes:

  • Perfecta adaptación a la cara.
  • Estanca: cualidad que comprobaremos de la siguiente forma: al colocar la máscara en la cara, ésta deberá aguantarse por sí misma (sin necesidad de utilizar correa), con sólo una inspiración de nariz.
  • Tapar la nariz, para poder realizar la operación de Valsava con facilidad.
  • Amplio campo de visión.
  • Espacio interior: será tanto más reducido cuanto más profundo se tenga previsto pescar.
  • Evitar los faldones laterales: producen reflejos contraproducentes.

Tubo respirador

Deberá ser un elemento sencillo y se recomienda además que sea perfectamente flexible (de plástico o goma), para que no se quiebre al rozar con cualquier superficie.

La elección del tubo es del todo personal, cada uno deberá probar y decantarse por aquel con el que se encuentre más cómodo. Es aconsejable seleccionar el tubo junto con la máscara, ya que esa es la mejor forma de determinar la comodidad real del tubo.

Aletas

Las aletas ofrecen al submarinista la posibilidad de desplazarse mucho más cómoda y rápidamente por el agua.

En el mercado pueden encontrar segran cantidad de modelos, cada uno de los cuales ofrece unas cualidades diferentes. La gran mayoría de ellos cuentan con unos nervios que canalizan el agua, evitando de este modo el derrapaje.

Para seleccionar nuestras aletas, conviene que nos las probemos con los escarpines colocados. No debemos sentir ninguna molestia, ningún tipo de presión. El pie debe estar sujeto en toda su longitud y esta sujección deberá mantenerse todo el tiempo, pero sin oprimir en ningún momento.

También es conveniente que sean ligeras, para que no supongan una carga y nos ayuden a fatigarnos menos. Actualmente se comercializan palas intercambiables de diferentes longitudes y grosores, que el pescador podrá seleccionar en función de sus cualidades y del tipo de pesca que vaya a realizar. De esta forma, si se tiene pensado realizar largos recorridos será más adecuado decantarse por palas flexibles y de poco peso; mientras que si lo que se desea es realizar pesca estática y a mayores profundidades, será más adecuado decantarse por unas palas más rígidas.

Fusiles

El fusil es, sin lugar a dudas, el elemento del equipo que mayor controversia suscita entre los pescadores. Existen dos tipos de fusiles principalmente: los oleoneumáticos de aire comprimido y los de gomas, cada uno de ellos ofrece una serie de ventajas y tiene algunos inconvenientes.

  • FUSILES DE AIRE COMPRIMIDO: se basa en el principio de la compresión de un gas (aire). Su mayor ventaja es la potencia (puede disparar varillas de gran diámetro); mientras su inconveniente principal reside en que el alcance y la precisión son menores. En consecuencia podemos decir que está indicado para presas de gran tamaño que encontremos a poca distancia.
  • FUSILES DE GOMAS: es más fiable que el anterior y se adapta mejor a casi cualquier situación, deberemos tener en cuenta, eso sí, la necesidad de sustituir las gomas con cierta regularidad para que no se rompan bruscamente.

La selección correcta del fusil es de máxima importancia para conseguir unos buenos resultados. A continuación recogemos una serie de consejos que le serán de utilidad:

  • Vigilar que la culata del fusil se adapte perfectamente a nuestra mano, tanto con el guante puesto como sin él.
  • Seleccionar la longitud correcta del tubo: para ello deberemos tener en cuenta que los tubos largos suelen ser más indicados para realizar disparos en aguas libres o sobre peces de difícil acercamiento; los tubos cortos por su parte se utilizan más en la pesca al agujero o bien cuando el agua está turbia.
  • Comprobar la posibilidad de adaptar fácilmente un carrete, así como la de incorporar gomas dobles.
  • El diámetro del tubo: dos son las medidas que suelen considerarse: el de 28 mm, el más común ya que ofrece una buena flotabilidad y sus modelos largos resisten mejor al cimbreo del tubo; después está el de 25 mm. que resulta más manejable en los movimientos laterales.
  • Debemos buscar el peso ideal, ya que un fusil excesivamente pesado sólo conseguirá provocarnos mayor fatiga, algo nada aconsejable debajo del agua.

En función del tipo de pesca que vayamos a realizar, pueden aconsejarse unos u otros modelos de fusil:

  • Pesca al agujero en grietas pequeñas: tubo de 50 cm y varilla de 75 cm de longitud por 6,5 ó 7 mm de diámetro.
  • Pesca al agujero en agua turbia: tubo de 75 cm y varilla de 115 cm por 6 ó 6,5 mm de diámetro.
  • Pesca polivalente (agujero y espera): tubo de 90 cm y varilla de 130 cm por 6, 5 mm de diámetro.
  • Pesca en aguas libres: tubo de 100 cm y varilla de 140 cm por 6,5 mm.
  • Pesca en aguas libres de peces de difíciles: tubo de 120 cm y varilla de 170 cm por 6,5 mm.

Además de todo esto, no podemos dejar de lado al TRIDENTE, que puede sernos de gran utilidad a pesar de que aquí en España no sea muy utilizado. Hoy en día los tridentes han sufrido una gran evolución y en podemos encontrar en el mercado instrumentos de gran calidad. A pesar de que su alcance es escaso, es un elemento totalmente adecuado para alcanzar una presa e inutilizarla completamente, sobre todo cuando se trata de pescar en zonas tipo escolleras con aguas turbias.

Cuchillo o puñal

Instrumento que nos servirá para matar determinadas presas y que, en más de una ocasión, nos puede librar de algún susto importante.

Debemos llevarlo siempre en el mismo sitio, lo que nos reportará mayor rapidez de respuesta en caso de que lo necesitemos urgentemente (sin tener que buscarlo). Además es conveniente que esté siempre perfectamente afilado, lo cual nos servirá para evitar realizar mayores esfuerzos en unos momentos en los que con total seguridad necesitaremos todas nuestras fuerzas.

El lugar donde suele colocarse este puñal es el la parte interior de las piernas, ya que allí acceder a él con ambas manos y no supone un elemento de riesgo para quedar enganchados (lo que sí lo haría en caso de que lo llevásemos por fuera).

La boya

El objetivo principal de la boya (cuya utilización es un requisito exigido por ley) es el de reforzar la seguridad y señalar al pescador en superficie. Además de esto, muchos pescadores obtienen de ella otras funciones añadiendole una driza de varios metros y un enrollador; con ello consiguen un lugar adecuado para dejar el material de recambio.

Además de la boya en el mercado se pueden encontrar Planchas de pesca, que últimamente cuentan con la aceptación de muchos pescadores ya que ofrecen menos resistencia en el agua que la boya, además el pescador puede nadar más cómodamente apoyándose sobre ella. Se utiliza sobre todo en competiciones.

Publicado en: Buceo, Material

New Account Register

¿Ya tienes una cuenta?
Log in instead Or Reiniciar contraseña