Robla Solo Mil

Utilizado por el ejército alemán, incluso en las fuerzas especiales, incluye amoníaco en su composición para disolver de la forma más eficaz el cobre, el zinc y el plomo (el principal enemigo de la precisión de un arma), sin atacar el acero, el cromo o el níquel. Si el cañón contiene pocos residuos, basta pasar varias veces un fieltro con el Robla Solo Mil. Y, si éstos son abundantes, deje el producto durante unas horas antes de proceder a su limpieza.
Para mejorar su eficacia, se recomienda utilizar el Ballistol a continuación.
Contenido: spray de 65 ml.

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A nadie que maneje un arma se le escapa el hecho de que la suciedad puede resultar el peor enemigo. La corrosión o el almacenamiento de alguna materia extraña puede dificultar el funcionamiento del arma y, en el caso de afectar a los cartuchos, provocar accidentes que pueden llegar a revestir serias consecuencias.

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